Carotenoides: un mundo lleno de color
Los colores vibrantes que adornan frutas y verduras no son solo una delicia visual, sino también un indicador de la presencia de carotenoides, compuestos que ofrecen una gama de beneficios para la salud.
Los carotenoides son un grupo de moléculas orgánicas liposolubles compuestos por dos o más unidades de hidrocarburos con propiedades benéficas para la salud humana tales como:
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actividad antioxidante
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agente protector contra enfermedades como el cáncer, enfermedades cardiovasculares, cataratas y diabetes, entre otras.
Los carotenoides se encuentran naturalmente en plantas, frutas, verduras y también pueden ser sintetizados por algunos microorganismos como hongos, microalgas y bacterias.
¿Cómo reconocemos los Carotenoides en los alimentos?
Hay una gran diversidad de alimentos que contienen carotenoides, de hecho ya se conocen más de 700 carotenoides en la naturaleza.
Una característica importante de porque los carotenoides son tan poderosos, es porque tienen la propiedad antioxidante, esto se deriva de la presencia de enlaces dobles conjugados; y estos ayudan a prevenir o retrasar el daño oxidativo y por lo tanto, también contribuyen a la prevención de algunas enfermedades generadas a partir del estrés oxidativo.
Te contamos sobre algunos carotenoides y sus beneficios:
Alfa-Caroteno:
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Se transforma en vitamina A y apoya en el mantenimiento de un sistema inmunológico, fortaleciendo nuestras defensas.
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Lo puedes encontrar en: zanahorias y calabazas.
Beta-Caroteno:
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El beta-caroteno, convertido en vitamina A en el cuerpo, es esencial para la visión, el sistema inmunológico y la salud de la piel.
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Lo puedes encontrar en: frutas y verduras de color naranja oscuro y verde.
Licopeno:
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Es un antioxidante que ha demostrado reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares y ciertos tipos de cáncer.
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Lo puedes encontrar en: tomates y productos derivados del tomate.
Criptoxantina:
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Tiene propiedades antiinflamatorias, contribuyendo a la salud de las articulaciones.
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Lo puedes encontrar en: frutas tropicales y pimientos rojos dulces.
Luteína y Zeaxantina:
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Estos carotenoides son cruciales para la salud ocular. La luteína y la zeaxantina se acumulan en la retina, actuando como un filtro natural contra la luz dañina y reduciendo el riesgo de enfermedades oculares relacionadas con la edad.
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Lo puedes encontrar en:
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Luteína: verduras de hojas verdes, maíz y hortalizas verdes.
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Zeaxantina: yema de huevo, maíz, harina de maíz y verduras de hojas verdes.
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Astaxantina
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Es un poderoso antioxidante:
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500 veces más antioxidante que la vitamina E
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10 veces más que el B-caroteno
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Este carotenoide tiene propiedades antioxidantes, protectoras contra la luz ultravioleta y anti inflamatorias. Hay bibliografía científica que respalda la protección de los tejidos corporales del daño oxidativo con la ingesta diaria de astaxantina natural y podría ser una estrategia práctica y beneficiosa en el manejo de la salud.
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Lo puedes encontrar en: alga Haematococcus pluvialis, la cual es la fuente más rica de astaxantina natural.
Si quieres profundizar en el tema, te invitamos a hacer clic en los siguientes enlaces:
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Junji Terao (2023). Revisiting carotenoids as dietary antioxidants for human health and disease prevention. Food & Function, 14(17), 7799-7824. https://doi.org/10.1039/d3fo02330c
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Carotenoids: Properties and bioprotective effects – Journal of BioProcess and Chemical Technology (2020). http://www.biochemtech.uadec.mx/2020/02/17/carotenoids-properties-and-bioprotective-effects